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Acompañamos esta postal con "la rumia" de una de las participantes en el Campo de Trabajo de Algeciras. Sus palabras bien resumen la experiencia que se nos ha regalado... Gracias a Andrés y a toda "su familia" por esos días de acogida.
Gemma y Guenther
(tomado del blog de Irene Muñoz)
Creo que ya he "rumiado" algo desde Algeciras, desde esa tormenta de sensaciones que a dia de hoy, casi 2 semanas después me ha dejado desubicada y atontada. Pero cuando esos dias han sido tan grandes, con tanto amor, comprensión, dureza y esfuerzo por intentar conseguir algo que tú ya tienes, sin haber hecho nada, cuando todo eso te golpea con un mazo, cualquier rumia es poca.
Eramos distintos pero a la vez tan iguales, con sueños, pero de distinto valor; su valor era lo humano y de ser mejores en este mundo tan injusto.
¿Y nosotros qué?, ¿un movil nuevo?
Hablabamos distintos idiomas, pero he aprendido a escuchar lo que me pasa por dentro y saber que ellos sienten lo mismo y que es eso lo que les hace dejarlo todo y desnudos tentar a la suerte por una utopía.
Nosotros. Acostumbrados al camino de siempre. A lo que ya sabemos. Sin cambiar. Cuanto más cambian las cosas, más seguimos igual.
Pero yo no, ya no.
Gracias.
Irene Muñoz
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