Es curioso el contraste entre nuestra forma de ver las distancias y cómo se perciben en Nicaragua. Cuando preguntas la distancia a recorrer o la respuesta es poco concreta o es una estimación que no se parece en nada a la realidad. Nuestros viajes de 3 horas en bestia se convirtieron en 6 ó 7 horas por caminos casi intransitables y con la sensación de no llegar. Para ellos sin embargo es el pan nuestro de cada día. ¿Qué hubiera sido de nosotros sin la ayuda de las personas de las comunidades que nos fueron a buscar en las bestias??? ¡Qué gente más acogedora y detallista nos hemos encontrado! Hemos viajado em autobús, caballo, mula, macho, camión , moto, andando , en barca... y no hemos estado en la comunidad más alejada....
Por otro lado, otra experiencia de encuentro con la dura realidad que a diario viven muchas personas en contraste con lo que nosotros vivimos. En Nicaragua 1 Km no parecen 1000 metros.
